Apagón masivo en Venezuela: Acusaciones de sabotaje y consecuencias para la población

Venezuela despertó en la madrugada del viernes con un gran apagón que dejó sin electricidad a Caracas y a varios estados del país. Según el gobierno de Nicolás Maduro, el corte de energía, que comenzó alrededor de las 4:50 a.m., se debió a un «sabotaje eléctrico», una acusación que se repite en medio de la crisis política que enfrenta la nación.
Freddy Náñez, ministro de Comunicaciones, anunció en redes sociales que los operarios ya trabajan para restablecer el suministro eléctrico en las áreas afectadas. En su mensaje, aseguró que “nadie le robará la paz a los venezolanos y las venezolanas”, reiterando que el gobierno cree que la oposición está detrás del apagón.
El ministro del Interior, Diosdado Cabello, también se pronunció en el canal estatal VTV, explicando que el proceso de restauración del servicio eléctrico ya está en marcha, aunque advirtió que sería gradual y que se tomarían las debidas medidas de seguridad para evitar errores.
El apagón llega en un momento de alta tensión política, a un mes de las elecciones presidenciales en las que Nicolás Maduro fue proclamado reelecto para un tercer mandato. La oposición, liderada por María Corina Machado, afirma que el verdadero ganador fue su candidato, Edmundo González Urrutia, y acusa al gobierno de fraude electoral. El chavismo, por su parte, ve estas denuncias como parte de un complot para desestabilizar al gobierno, vinculando el apagón con la oposición.
En algunos sectores de Caracas, como Petare, el servicio eléctrico fue restablecido rápidamente, pero en otras áreas, especialmente en el centro de la capital, la electricidad apenas comenzaba a regresar. El metro de Caracas quedó interrumpido y el tráfico se vio afectado debido a la falta de luz en los semáforos y en las estaciones de servicio.
Los apagones son una realidad habitual en Venezuela, pero la magnitud y duración de este corte han generado una gran conmoción. “Uno está mentalmente acostumbrado a estas cosas”, comentó Leticia Quiroga, una funcionaria pública de 30 años, quien esperaba instrucciones sobre cómo proceder en su trabajo.
La falta de servicio de telefonía móvil complicó la comunicación entre los habitantes de la capital, aumentando la incertidumbre. A pesar de esto, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, afirmó que “todo está bajo control” y que no se han reportado situaciones relevantes en ninguna parte del país.
Aunque el gobierno de Maduro culpa a la oposición de sabotajes eléctricos, expertos en energía sostienen que estos cortes son a menudo el resultado de incendios y del deficiente mantenimiento de la infraestructura eléctrica del país. A pesar de cierta estabilización económica en los últimos años, los problemas energéticos persisten, y el apagón del viernes, el segundo de gran magnitud en menos de una semana, ha dejado a los venezolanos en alerta, temiendo que las tensiones políticas continúen afectando su vida cotidiana.