Austin Wells, un estadounidense de 28 años, ha optado por un estilo de vida fuera de lo común. Mientras muchos luchan con la crisis inmobiliaria, Wells decidió aprovecharla de una manera inusual: en lugar de comprar una casa, invirtió en una habitación a bordo de un crucero, lo que le permite viajar por el mundo mientras trabaja de forma remota.
Wells, oriundo de San Diego, se ha convertido en una sensación al compartir su experiencia y argumentar que su elección es más accesible y emocionante de lo que muchos imaginan. Asegura que más jóvenes deberían considerar este estilo de vida, que ofrece tanto aventura como ahorro.
Por 300,000 dólares, Wells adquirió una habitación de 22 metros cuadrados en el crucero MV Narrative. Su camarote incluye una cama plegable, una despensa, un escritorio y una ducha separada. Comparado con el costo de los alquileres en San Diego, donde un apartamento promedio cuesta 2,500 dólares al mes, su camarote le sale por unos 2,000 dólares mensuales, lo que le permite ahorrar dinero mientras explora diferentes destinos.
El crucero, que comenzará a navegar en 2025, contará con 500 apartamentos privados, 20 restaurantes y bares, un gimnasio de 929 metros cuadrados, una biblioteca, un cine, una escuela y tres piscinas. Para Wells, esta alternativa no solo representa una forma de ahorro, sino una oportunidad única de vivir una vida plena y llena de nuevas experiencias.
