Bianca Censori y Kanye West fueron vetados de un restaurante en Los Ángeles por su vestimenta
Bianca Censori vuelve a ser el centro de la atención debido a su controvertido sentido de la moda, el cual algunos consideran que roza la desnudez en lugares públicos, causando incomodidad a otros. Recientemente, en Los Ángeles, Censori y su pareja fueron vistos en un restaurante de barbacoa, donde ella vestía una prenda mínima que apenas cubría su torso, generando una ola de comentarios y críticas.
El atuendo provocó tal controversia que varios dueños de restaurantes de la ciudad están considerando prohibirles la entrada debido a su vestimenta inadecuada. «Si soy el dueño de cualquier establecimiento que ellos intenten entrar, les diré que, por respeto a mis clientes, no se les permite la entrada», declaró un propietario de un restaurante a la prensa local. Otro añadió: «Yo no los tendría en mi restaurante. Es totalmente inapropiado y no es un buen modelo para los niños. ¿Qué les pasa?».
Las críticas hacia Censori se centran en la percepción de su vestuario como inapropiado para entornos públicos: «Ella luce absolutamente ridícula. ¿Cómo puede un restaurante decente aceptar a un cliente vestido así? Incluso los supermercados tienen letreros en verano que aconsejan que se debe usar camisa por razones de higiene. Esto es mucho peor». Otro comentario reflejaba una perspectiva similar: «Solían negarte la entrada por códigos de vestimenta en un restaurante si no usabas corbata. ¡Cómo han cambiado los tiempos, ahora puedes entrar y cenar casi desnudo!».
El Daily Mail también recopiló opiniones de otros comensales de restaurantes similares frecuentados por la pareja. Las respuestas fueron mayormente negativas, aun en una era donde la elección del vestuario se considera más libre. «Ningún dueño de restaurante respetable o gerente debería permitirles entrar con ella vestida así a menos que, de antemano, paguen para reservar todo el restaurante para que sea su propio lugar privado mientras estén allí», comentó un asistente. Otro añadió: «No entiendo por qué cualquier restaurante decente dejaría entrar a alguien vestido así».
