Cáncer de un niño de siete años desaparece tras someterse a un tratamiento experimental
El pequeño Matías, un niño de 7 años con cáncer linfoblástico agudo B se ha sanado de la temible enfermedad gracias a un tratamiento experimental.
Los expertos han indicado que aunque el tumor ha desaparecido, existe el temor de que vuelva y el pequeño será sometido a una operación de médula.
El diagnóstico del menor llegó cuando apenas tenía diez meses, devastando a sus padres y seres queridos porque la enfermedad es incapaz de reaccionar a las quimioterapias y al trasplante de médula.
El niño de 7 años fue sometido en España un trasplante de médula procedente de su hermana Paola, y más tarde le inocularon estas células con el fin de destruir las malignas, pero el cáncer regresó.
La noticia fue peor que el diagnóstico, el dinero y los esfuerzos por salvar a Matías habían fracasado por completo.
Fue hasta que se enteraron de un tratamiento compuesto por una terapia celular de última generación denominada CAR-T que ya usaron durante el trasplante.
El tratamiento al que fue sometido el niño de 7 años no se había probado ni se había aplicado con anterioridad, lo que ha causado una revolución en el mundo de la medicina para la lucha contra la enfermedad.
El médico encargado del tratamiento, Antonio Pérez, explicó que los el tratamiento lo que hace es eliminar y sacar del cuerpo el tumor.
“Imagina que la célula es una persona, los CAR-T le cogen de un brazo para eliminarla; esta, a la que llamamos tándem, te coge de un brazo y de una oreja, así que no te puedes escapar”.
El niño de 7 años empezó a recibir el tratamiento el pasado 29 de diciembre, haciendo que el tumor intratable desapareciera.
Hace unos días, en Francia se conoció un caso similar con un menor identificado como Lucas que lleva más de dos años libre del cáncer.