Francia Marquez está aburrida de la impuntualidad de Gustavo Petro, la dejó esperando 5 horas en Chocó

El presidente Gustavo Petro protagonizó, una vez más, un desplante público que se suma a los que le ha hecho en los últimos cinco meses a militares, policías, magistrados de las altas cortes, taxistas e incluso a sus ministros.

El más reciente se registró en el municipio de Istmina, Chocó, pero en esta ocasión hubo un agravante: dejó esperando por más de cinco horas a quien –en teoría– es su coequipera en el poder, la vicepresidenta Francia Márquez.

Aunque estaba previsto que el Jefe de Estado llegara sobre la 1:00 de la tarde del miércoles a ese municipio, su arribo se registró después de las 7:00 de la noche del mismo día, lo que implicó que cientos de personas se quedaran esperándolo para un evento que, supuestamente, era prioritario para su Gobierno, pues allí tenía previsto sancionar la ley que crea el Ministerio de la Igualdad, cartera que quedará en manos de la vicepresidenta Márquez.

Este desplante público, que no es el primero que le hace el Mandatario a la Vicepresidenta, volvió a darle fuerza a la versión del supuesto distanciamiento entre los dos, que tiene antecedentes, pues desde la época de la campaña presidencial y su posterior llegada al poder, el 7 de agosto de 2022, ambos han tenido una serie de desavenencias políticas que han transmitido una percepción de división, tanto al interior del Gobierno como ante la opinión pública.

Se respiran aires de división

Pasadas las 4:00 de la tarde, en medio de la incertidumbre sobre la presencia de Petro, la Vicepresidenta decidió romper los protocolos y empezó la ceremonia en Istmina –sin el Jefe de Estado– para decirles a los representantes de las comunidades afrochocoanas, presentes en el recinto, que ella estaba allí dando la cara, pero la sanción de la ley dependía única y exclusivamente del Mandatario, quien supuestamente se demoró por contratiempos en su agenda privada y retrasos en su salida del aeropuerto de Pereira.

“Yo sé que todos ustedes tienen la expectativa de que el Presidente llegue en cualquier momento, yo también la tengo. Y esperamos que así sea. Pero aquí estamos como Gobierno Nacional y aquí está su Vicepresidenta poniendo la cara”, expuso Márquez.

Este episodio no pasó desapercibido, ya que más allá de tratarse de otra de las comunes llegadas tarde del Presidente, representó un desplante a su coequipera, lo que reforzó la versión de división que le han confirmado a este diario fuentes al interior del Pacto desde septiembre, pues a pesar de llegar juntos al poder, Petro y Francia han tenido en los últimos meses varios puntos críticos en su relación política, especialmente porque la Vicepresidenta estaría sintiendo que le han embolatado su poder en el Ejecutivo.