John Alfred Tinniswood: El hombre más longevo del mundo celebra 112 años
John Alfred Tinniswood nació en 1912, el mismo año en que el Titanic se hundió y Nuevo México y Arizona se convirtieron en estados de Estados Unidos. Ahora, a los 112 años, es el hombre vivo más longevo del mundo. Tinniswood celebró su cumpleaños el 26 de agosto rodeado de amigos y familiares en su residencia en Southport, una ciudad costera en el oeste de Inglaterra, según informa Guinness World Records (GWR).
Antes de su cumpleaños, Tinniswood comentó a GWR que no siente que cumplir 112 años sea algo especial: «No siento esa edad, no me emociona. Probablemente por eso la he alcanzado. Me lo tomo con calma, como cualquier otra cosa», dijo en un comunicado de prensa.
Padre de uno, abuelo de cuatro y bisabuelo de tres, Tinniswood fue reconocido en abril por GWR como el hombre vivo de más edad. También es el veterano de la Segunda Guerra Mundial más longevo que sigue con vida.
Tinniswood atribuye su longevidad a la moderación en la vida. Disfruta escuchando la radio y sigue realizando muchas de sus tareas cotidianas, como levantarse de la cama y gestionar sus finanzas, sin ayuda. «No se me ocurre ningún secreto especial. De joven era bastante activo; caminaba mucho. Pero para mí, no soy diferente a los demás. En absoluto», afirmó.
Cuando le preguntaron cómo cree que será el mundo dentro de otros 112 años, Tinniswood respondió: «Oh, Dios mío. Bueno, quiero decir más honestidad entre los distintos países. Todos, incluido el nuestro, dan un poco de espectáculo de vez en cuando».
Tinniswood es cuatro años más joven que la mujer más longeva y la persona viva más longeva del mundo, la japonesa Tomiko Itooka, que tiene 116 años. La semana pasada, Itooka asumió el título tras el f4ll3c1m13nt0 de la estadounidense Maria Branyas Morera, que tenía 117 años.
Tinniswood también está a cuatro años de convertirse en el hombre más viejo de la historia, un título que pertenece al japonés Jiroemon Kimura, quien vivió 116 años entre 1897 y 2013. La persona más longeva de la historia, la francesa Jeanne Calment, vivió 122 años, entre 1875 y 1997.