Millonaria cifra: esto vale criar un hijo en Colombia hasta los 18 años

Criar un hijo en Colombia hasta los 18 años puede costar más de lo que muchos imaginan. Hay que tener en cuenta la alimentación, la escolarización, la vestimenta, recreación, y necesidades básicas.
De acuerdo con estimaciones de la Universidad EAN, publicadas por el diario económico La República, el gasto total para acompañar a un menor desde su nacimiento hasta la adultez podría oscilar entre $1.700 millones y $2.200 millones.
Esto equivale a unos 1.200 a 1.600 salarios mínimos mensuales, calculados sobre el salario mínimo de 2025, que está en $1,4 millones.
La cifra varía según el nivel de ingresos de cada familia, el tipo de educación, la calidad de la atención en salud y otros factores como alimentación y servicios públicos.
Incluso Bbva estima que, en condiciones de vida cómodas, la inversión puede llegar a $1.349 millones. Uno de los gastos más significativos es la educación.
Carlos Roberto Peña, director de Sapiens Research, explicó que los colegios privados calendario B suelen ser más costosos que los del calendario A, aunque dentro de este último también hay diferencias según si la institución es pública o privada.
En los niveles más altos, las pensiones escolares pueden alcanzar entre $2,5 y $5 millones mensuales; en estratos medios, entre $1,5 y $2,5 millones; y en los sectores más bajos, de $500.000 a $1,5 millones.
A ello se suman costos de transporte y alimentación, incluso para quienes acceden a la educación pública. El acceso a servicios de salud también impacta el presupuesto familiar.
Por ejemplo, un plan de medicina prepagada estándar puede costar alrededor de $250.000 mensuales, lo que representa unos $3 millones al año adicionales al sistema de seguridad social obligatorio.
En cuanto a las necesidades básicas, el Dane calcula que la línea de pobreza monetaria está en $435.375 mensuales, cifra que cubre gastos como vivienda, transporte, ropa y calzado, lo que equivale a unos $5,28 millones al año.
Este fenómeno responde, según el Dane, a cambios sociales y económicos, así como al mayor acceso a métodos anticonceptivos.
Y no es un caso exclusivo de Colombia, pues tendencias similares se están observando en otros países de América Latina y Europa.