En Francia, una nueva línea de investigación ha emergido durante el juicio del hombre acusado de drogar a su esposa para facilitar que decenas de hombres abusaran sexualmente de ella.
En un giro inesperado, la hija y la nuera del acusado ahora sospechan que también podrían haber sido víctimas de abusos sexuales.
En la sala del tribunal, Gisèle Pelicot, quien ha sido la principal víctima de este caso durante nueve años, expresó su deseo de que su historia sea conocida para prevenir futuros abusos.
La evidencia presentada también incluye la sorprendente revelación de que Dominique poseía fotografías comprometedoras de su hija.
“No es fácil evidentemente… y está la presión de todos esos hombres detrás de mí. Sentí como si estuvieran tratando de atraparme con sus preguntas. Intenté responder lo mejor posible, habrá que luchar hasta el final, porque este proceso va a durar cuatro meses”, afirmó Gisèle Pelicot.
Hasta ahora, se han identificado a cerca de 50 hombres involucrados en el caso, quienes enfrentan cargos de violación agravada.
La investigación se ha ampliado para incluir la posible victimización de la nuera del acusado, lo que ha llevado a una revisión más exhaustiva de los dispositivos electrónicos de Dominique Pélicot.
El descubrimiento de la evidencia en 2020, tras el arresto de Dominique por grabar a mujeres en un supermercado, reveló la magnitud de los crímenes cometidos.
El juicio, que se extenderá por cuatro meses, ha atraído una atención considerable, reflejando la gravedad de los delitos y el impacto en las víctimas. La corte continúa investigando y recopilando testimonios para asegurar que se haga justicia.
Este caso sigue desarrollándose y podría tener implicaciones significativas para la justicia y la protección de las víctimas de abuso sexual.
