Tras sufrir quemaduras de tercer grado a sus seis años, se hizo bombero a los 27 para enfrentar sus miedos
Terry McCarty, un estadounidense que sufrió quemaduras de tercer grado en el 70% de su cuerpo, durante un accidente que tuvo en la infancia, le hizo frente a sus más grandes miedos al convertirse en bombero.
Según informa el medio Daily Mail, a la edad de seis años, McCarty fue devorado por las llamas cuando sus hermanos llenaron un envase de kerosene que accidentalmente se incendió y se propagó hasta él.
El joven de 29 años originario de Hawthorne, Nevada, tuvo que atravesar 58 operaciones, así como las bromas crueles de los matones en la escuela que lo llamaban Freddy Krueger por sus heridas en la cara, brazos y piernas.
Pero, si algo no le faltó a McCarty fue la determinación. Así, decidió sobreponerse a la desagarradora experiencia que mermó su confianza durante años.
«Convertirme en bombero fue una decisión espontánea», pensé que si podía hacer esto, la gente se daría cuenta que puedo hacer cualquier cosa.
Durante mucho tiempo, el joven tuvo problemas para encontrar empleo ya que consideraban que significaba mucha responsabilidad y estaba comenzando a creerlo.
Hasta que, fue admitido en la escuela de bomberos en abril del 2012, donde tuvo que pasar 12 semanas de entrenamiento exhaustivo y confrontar al fuego por primera vez desde el accidente.
Tras haber aprobado su entrenamiento, McCarty ganó la admiración y respeto de todos sus colegas y el público. Luego de dos años como bombero, renunció para trabajar en la fundación para niños con quemaduras Camp Phoenix, un programa en Bellingham, Washington, para dar apoyo a menores que han pasado lo mismo que él.
