Un gesto de solidaridad: Rival ayuda a capitana lesionada durante un crucial partido de balonmano
Durante un emocionante encuentro de balonmano en los Juegos Olímpicos de París 2024, con el pase a los cuartos de final en juego, la capitana de Angola, Albertina Kassoma, sufrió una lesión de rodilla que la dejó inmovilizada en la cancha. A pesar de los esfuerzos del médico de su equipo y de la guardameta brasileña, Gabriela Moreschi, Kassoma no pudo ponerse de pie.
Fue entonces cuando Tamires Araujo Frossard, una jugadora brasileña y rival a nivel de clubes, se acercó para ofrecer su ayuda. Ambas deportistas militan en la liga rumana, donde Frossard juega para Gloria Bistrița y Kassoma para Rapid București. Aunque rivales en el campo, Frossard, con una estatura similar a la de Kassoma, fue la única capaz de levantar a la lesionada capitana angoleña, recibiendo el aplauso de los 5.800 espectadores en el South Paris Arena 6.
Este acto de compañerismo se convirtió en un símbolo de juego limpio en los Juegos Olímpicos, destacando la importancia de la solidaridad por encima de la competencia. Durante el momento de ayuda, las dos jugadoras intercambiaron palabras de agradecimiento en su idioma nativo. «Muchas gracias, amiga. Sólo tú podías levantarme», le dijo Kassoma a Frossard, quien más tarde expresó su esperanza en la pronta recuperación de su colega.
El partido terminó con una victoria de Brasil por 30-19, asegurando su lugar en los cuartos de final, donde enfrentarán a Noruega, campeonas en Londres 2012. A pesar del resultado, el gesto de Frossard hacia Kassoma subrayó que, en el deporte, hay momentos que trascienden el simple hecho de ganar o perder.