Si hay algo más importante en la temporada de tenis que los partidos es la llegada de David Beckham a Wimbledon. El torneo de máximo prestigio del mundo del deporte no solo es estricto con sus normas, también con la lista de invitados.
El palco real del All England Club acomoda a las estrellas más importantes del mundo por invitación personal. Todas con sus mejores galas estivales, pero ninguna tan estilosa como David Beckham.
El comienzo de Wimbledon es el comienzo de la temporada de hierba. Las pistas del torneo inglés son las únicas que sobreviven en el Grand Slam en esta modalidad, pero no solo por eso es el más especial de todos. Las normas de Wimbledon son estrictas, al más elegante estilo inglés. Desde el primer partido hasta el último, el espíritu del campeonato exuda exclusividad.
En pista solo está permitido el color blanco, una norma que últimamente causa controversia, desde que los tenistas han empezado a desafiarla. En las gradas el público se esfuerza por mantener el nivel de elegancia bajo el sol veraniego. Por supuesto es el palco real, que también tiene sus propias normas, el que supera todas las expectativas con creces.
Nuestras celebrities favoritas son asiduas a los partidos de tenis sobre hierba. Andrew Garfield, Jonathan Bailey o Tom Hiddleston se dejan ver de vez en cuando en los mejores asientos del estadio, para darnos lecciones de dandy inglés.
A David Beckham, sin embargo, no se le puede poner ni una falta de asistencia en el All England Club. El astro del fútbol es un ferviente seguidor de la temporada de tenis y Wimbledon es la ocasión ideal para disfrutar del deporte mientras mantiene su posición de rey del estilo.
