La familia de Alain Delon decide no cumplir su último deseo de sacrificar a su perro y ent3rr4rl0 junto a él
El pasado domingo, la muerte del legendario actor Alain Delon conmovió al mundo del cine. Tras años luchando contra un linfoma, Delon f4ll3c1ó en su casa de Douchy, rodeado de sus tres hijos. Sin embargo, a pesar de los deseos expresados por el actor, su familia ha decidido no cumplir una de sus últimas voluntades: sacrificar a su querido perro Loubo para que fuera ent3rr4d0 junto a él.
Alain Delon había manifestado en varias ocasiones su profundo apego por Loubo, un pastor belga malinois que adoptó de un refugio hace diez años. En una entrevista, Delon confesó que deseaba que, al m0r1r él, su perro fuera «dormido» y sepultado a su lado en el cementerio que él mismo había construido en su propiedad. Para Delon, la idea de dejar a Loubo solo y sufriendo por su ausencia era insoportable, y por eso prefería que ambos descansaran juntos.
Sin embargo, la familia del actor decidió no cumplir con este deseo. A pesar de entender el vínculo especial que Delon tenía con su perro, sus hijos no pudieron llevar a cabo el sacrificio de Loubo, quien todavía está en buena salud. La fundación Brigitte Bardot confirmó en un comunicado que Loubo no será sacrificado y que la familia se encargará de su cuidado.
Este gesto ha generado alivio entre muchos seguidores de Delon, aunque también ha dejado en evidencia el conflicto entre honrar los deseos de un ser querido y tomar decisiones que consideran más compasivas. Aunque la familia de Delon no cumplirá con este último deseo, sí respetarán otra de sus peticiones: el actor será enterrado en una ceremonia íntima, en la capilla que construyó para él y sus anteriores 35 mascotas, en los terrenos de su hogar en Douchy.
