Llueven críticas a Masterchef: una participante renunció por salud mental y a los jueces les dio igual
La más reciente edición de Masterchef España ha sido sacudida por un escándalo que ha dejado perplejos a los seguidores del famoso programa.
Tamara, una de las concursantes más polémicas de la temporada, decidió abandonar la competencia debido a problemas de salud mental, pero su renuncia no fue recibida con comprensión por parte de los jueces Pepe Rodríguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo-Nágera.
El incidente tuvo lugar durante la grabación de uno de los episodios más recientes de Masterchef 12, cuando Tamara expresó frente a las cámaras y al jurado su decisión de retirarse. Con lágrimas en los ojos, la concursante explicó: “Perdonadme, pero es más importante estar bien yo que decepcionaros a vosotros, con todo el cariño del mundo”. Sin embargo, la respuesta de los jueces fue fría y desinteresada.
Jordi Cruz, uno de los chefs más reconocidos del programa, le espetó a Tamara: “muy bien, ciao, tu delantal y su puerta; aquí no ha pasado absolutamente nada”. Esta falta de empatía por parte del jurado ha generado una oleada de críticas en las redes sociales y ha llamado la atención de figuras públicas, incluida la ministra de Sanidad, Mónica García.
La ministra compartió en su cuenta de una red social un fragmento del momento en que Tamara anunciaba su salida, acompañado de un mensaje contundente: “No, priorizar el bienestar emocional sobre los ritmos de vida frenéticos no es egoísmo, sino una decisión valiente. Nuestro compromiso con la salud mental implica abordar las causas que hacen que la vida duela”.
Tamara había manifestado en varias ocasiones su malestar dentro del programa. Antes de su renuncia, expresó: “Me siento muy frustrada y no me apetece seguir en la dinámica en la que no estoy bien”. Esta situación no era nueva, ya que la concursante había tenido enfrentamientos previos con sus compañeros y con el propio programa.
El debate sobre cómo se abordan las situaciones de salud mental en espacios mediáticos como Masterchef ha cobrado fuerza, y muchos espectadores y expertos coinciden en la necesidad de una mayor sensibilidad y comprensión hacia este tipo de problemas. La renuncia de Tamara ha puesto en el centro de la discusión la importancia de priorizar el bienestar emocional por encima de las exigencias de la competencia televisiva.