Raphael recibió el alta hospitalaria el viernes 27 de diciembre, luego de pasar 10 días en el Hospital 12 de Octubre de Madrid tras ser diagnosticado con un linfoma cerebral.
Poco antes de su salida, su hijo Jacobo informó a los medios que el cantante se encontraba “muy bien” y que saldría acompañado de su esposa, Natalia Figueroa, debido a que aún se encontraba algo débil físicamente. Minutos después, se vio a Raphael en el automóvil familiar, ocupando el asiento del copiloto, con su característico sombrero panameño y saludando a los periodistas desde la ventana, aunque evitó hacer declaraciones debido a las emociones vividas en los últimos días.
